¡LO QUE SEA!

Siempre siento que pido mucho. Al parecer es verdad. Pido que la gente se divierta conmigo. Que quiera estar conmigo. Que quiera jugar billar o baraja o turista o dominó o voli o básquet o chingadamente lo que sea. Que quiera hablar de lo que le gusta, de su familia, de su pasado, de su presente, de lo que sea. Que quiera conocer lugares conmigo. Que quiera ver películas o escuchar música o leer (no lo mismo pero acompañándonos) o lo que sea. Que quiera compartir lo que disfruta, sea lugares, comida, bebidas, actividades, personas... ¡lo que sea! Demonios. ¿De verdad les cuesta tanto trabajo? Luego me preguntan por qué soy tan agresiva, por qué fumo tanto, por qué digo tanta palabra soez, chinga! De alguna manera tengo que descargar mi ira (no mi hermana, ella nomás se cansa, jaja).